El entusiasmo llegó a tal nivel que el año pasado por su cumple sus padres le regalaron una cocinita de juguete, Javier adoraba a esa cocinita, y la cuidaba como si fuera su propia vida. Cada mañana, cuando se levantaba, Javier se vestía, desayunaba y limpiaba su cocinita de arriba a abajo. Luego, se despedía de ella y se iba al colegio.
Un día, Javier le dijo a su madre que a partir de ahora la comida la haría él en su cocinita, y la madre, como sabía que eso era imposible que hiciera tal cosa ya que su cocinita era de mentira, no le echó cuenta.
La madre de Javier alucinando le preguntó que cómo lo había hecho todo él solo, a lo que Javier contestó:-¡De mayor quiero ser como los cocineros famosos que veo en la televisión!-
5 años después, Javier tenía un gran restaurante de 4 tenedores ¡ Y con solo 10 años! Su gran fama atrajo a miles de personas de todos los países del mundo, Javier era rico y preparaba unos platos ¡Para chuparse los dedos!
Salía en los periódicos , en el telediario,etc...
Cada vez tenía más restaurantes ¡Y más dinero!
Sus padres no se esperaban que esto de la cocina llegaría tan lejos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario